Moviendo ideas: crónicas desde el Va y Ven

   Por Alicia Carrillo, colaboradora del OMSM.

Antes que nada, quisiera aclarar que este texto no pretende ser un análisis, ni un documento técnico, ni de sugerencias de mejora, es una simple narración de mi experiencia como usuaria cotidiana del transporte público, la que he obtenido después de 41 años viviendo en la ciudad. También quisiera aclarar que no trabajo en una oficina con aire acondicionado, ni me pagan para escribir, ni conozco al gobernador, no tengo amistad con ningún político, no uso auto, sólo bicicleta, transporte público y mis pies.

Desde que anunciaron la posibilidad de una ruta que rodeara la ciudad por el periférico, sentí mucha emoción. Cualquier ruta, transporte, o cosa que te ahorre tiempo y dinero, es algo digno de esperarse. Al inaugurarse la ruta, lo primero que pensé fue en organizarme para poder usarla para ir al trabajo, se me hizo muy atractiva la idea de no tener que ir al centro y tal vez llegar más rápido. Tracé mentalmente mi itinerario y en qué situaciones podía usar la ruta, aprovechando que no tendría un costo por ahora.

La primera vez que me subí al “Va y Ven” fue para regresar a casa de mi cita médica en el ISSSTE de Lindavista. Salí de la clínica, caminé hasta el periférico (aproximadamente 10 minutos), cabe mencionar que en la zona las banquetas son escasas y en muy malas condiciones (pero eso ya es digno de un análisis aparte). Subí el puente antipeatonal que me llevó aproximadamente 7 minutos y de acuerdo con la aplicación el autobús llegaría en 7 minutos, luego cambió y decía que en 9 minutos.

Eran las 5:45 pm y el autobús venía lleno. Estuve observando la cantidad de personas que subían y bajaban, en su mayoría, personas con uniformes de empresas o trabajadores con herramientas de diversos tipos. En todos los paraderos subía y bajaba mucha gente. Al llegar al paradero de la avenida Canek, ya había preparado mi celular para grabar la bajada de las personas, en el video tardan 50 segundos en bajar, al ser las puertas mucho más anchas que las de los camiones normales, la cantidad de personas es mayor, fue muy emocionante observarlo, parecía como si el camión hubiera llegado a su paradero final. Recorrí 15 paraderos de Lindavista a la 42 sur, me hice una hora con 4 minutos. El autobús fue a una velocidad promedio de 37 km/h.

En la segunda ocasión me animé a ir al trabajo, según la experiencia anterior calculé que, con 1 hora, me bastaría para llegar a tiempo. Esperé el autobús en la 42 sur, para ir al paradero de Tixcacal, de allá caminar aproximadamente kilómetro y medio al trabajo. Según la aplicación debía pasar el autobús a las 7:04, pero al monitorear en el celular, se fue retrasando la llegada, finalmente pasó a las 7:16. El autobús siguiente ya estaba muy cerca, al llegar al paradero de “Diamante Opichén”, ya se llevaban un paradero de distancia. El autobús venía muy lleno y según la velocidad que mostraba en la pantalla, se movió a un promedio de 30 km/h. Tardé 35 minutos en recorrer 6 paraderos. Mucho más lento en comparación al día anterior que recorrió 15 paraderos en una hora con 4 minutos. Ese mismo día lo agarré de regreso a casa y al no ser hora pico, la experiencia fue mucho más placentera, menos personas, pero igual de lento el trayecto.

Lo anterior, me lleva a reflexionar sobre lo siguiente, a manera de lista de deseos de año nuevo:

  1. Deseo que esta ruta sirva para que las personas lleguen más rápido a donde vayan y que les sea más barato.
  2. Sobre la tarifa, deseo que realmente las personas que la usen, sientan también en sus bolsillos los beneficios. Aunque con los $12 pesos anunciados, si tienes que transbordar, entonces el tiempo es lo que tal vez podrías ahorrarte.
  3. Definitivamente la velocidad es uno de los factores que cobra vidas cada año, pero para mí ir a 30 kilómetros en el periférico, es demasiado lento, incluso en el día que regresé a casa en hora valle, la velocidad fue la misma y se hace muy largo el viaje.
  4. Desearía que esta ruta tuviera un carril exclusivo en el periférico, se tardan mucho en salir de las laterales y por el tamaño, es complicado para los choferes hacerlo.
  5. Un deseo cumplido fue obtener mi tarjeta, acá quisiera comentar que no las entregan a todas las personas, el comentario final en la entrevista que me hicieron fue “es que hay quienes no van a usar el camión, entonces para qué se las damos”. Entiendo esta parte, pero entonces no debieron anunciar la entrega junto con la inauguración de la ruta. Estamos a pocos días del 2022 y no han anunciado cómo será el mecanismo para obtenerla.

     6.- Desearía que la comodidad de viajar en un autobús de ese tipo se pudiera extender, tal vez no a todas las rutas, eso ya sería soñar demasiado alto, pero sí a algunas o mínimo al metropolitano que es utilizado por muchísimas personas.

     7.- En cuanto al uso de la aplicación, no le encuentro realmente la utilidad, ya que es más “triste” o frustrante ver cómo se va atrasando tu autobús, en las 3 veces que usé la ruta las 3 se atrasó por varios minutos. La aplicación se va actualizando para dar la hora en la que llegará, pero no es un horario fijo. A mi parecer ese fue un factor negativo, porque fue como esperar el camión de cualquier otra ruta. Deseo que ese aspecto mejore.

   8.- Otra cosa que deseo con mucho entusiasmo es que, a estas unidades, sí les den mantenimiento o de lo contrario serán tan horribles como cualquiera de los camiones milenarios y destartalados que circulan por la ciudad. Quisiera acotar que no es solamente que el chofer barra su unidad al finalizar el día, o que la gente no las escriba (ese es otro tema), sino que les den un mantenimiento real y cuando debe ser, no sólo cuando ya no funcionan.

     9.- Relacionado con esta ruta, están los puentes antipeatonales. Fue muy doloroso saber que le apostaron a esta infraestructura, aunque reconozco que no me sorprendió, porque al parecer, no han llegado las ideas de lo nuevo que sucede en el mundo a mi hermosa ciudad, a pesar de que los funcionarios gastan mucho del presupuesto viajando a Europa. Creo que no tengo que explicar gran cosa aquí, pueden consultar las infografías en la página de la “Liga Peatonal” para saber por qué son antipeatonales. Mis privilegios me permiten usarlos, pero a pesar de que algunos cuentan con elevador (muy caros y destinados a abandonarse por el mantenimiento que requieren), no son todos y son muy costosos.

      10.- La parte de la inclusión para esta ruta, me parece buena en el autobús y no muy bien pensada en los puentes.

     11.- Los últimos dos deseos estarán en el mismo punto y serán prácticamente una repetición del primer punto, porque me parece muy importante que así sea. Que con esta ruta muchas personas lleguen más rápido a sus trabajos, escuelas, hogares, etc y gastando menos. Que esta ruta se convierta en una buena opción y que a la gente le convenga, en un momento dado, dejar el auto en casa.

“Todas las personas merecemos un transporte digno y accesible, deseo que esta ruta sea un primer paso hacia ese derecho.”

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